Ayudas a los municipios con menos de 2.000 habitantes y a entidades locales menores dependientes de aquellos que cuenten con menos de 20.000 habitantes para la adquisición e instalación de DESA y la formación necesaria para su uso.
Se pretende mejorar las condiciones de respuesta en caso de accidente cardiovascular o cerebrovascular, en particular y preferentemente en el ámbito laboral, pero con efectos que se extienden también a toda la población del municipio, tratando así de cumplir con el objetivo de reducir los efectos de la siniestralidad laboral en el ámbito rural.