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La obra del segoviano Luis Moro lanza un grito de auxilio desde el Semillero de Arte de la Diputación en el Museo Esteban Vicente
18/2/2023 ·- Institucional
- Cultura
Cuando apenas resta una semana para que los visitantes al Museo Tecnológico del Vidrio del Real Sitio de San Ildefonso puedan disfrutar de la exposición ‘La esfera invisible’, de Luis Moro, el Museo de Arte Contemporáneo Esteban Vicente abre las puertas al artista segoviano, cuya obra, diferente a la que ahora se expone en el centro granjeño, ocupará las salas 1, 3, 4 y 5 del Museo hasta el próximo 28 de mayo para que pueda ser contemplada, disfrutada y reflexionada por cuantos visiten el Esteban Vicente durante los próximos meses.
Y es que, desde el Semillero de Arte de la Diputación, que surgió bajo el propósito de poder ofrecer a los artistas de la provincia que emergen destacando en el mundo del arte contemporáneo la oportunidad de mostrar su obra en el prestigioso Museo, Luis Moro lanza un grito de auxilio y reflexión acerca de la salvación de las especies y ecosistemas que habitan el planeta y el papel que tiene el ser humano en ese rescate.
Bajo el título ‘S.OS. Save Our Souls’ (S.O.S. Salvar Nuestras Almas), Luis Moro reúne cuadros e instalaciones -utilizando en algunos casos las nuevas tecnologías- realizadas entre 1991 y 2023 con el propósito de contraponer ideas y plantear conflictos en torno a la inseparable naturaleza que habita sus obras. Animales, insectos e incluso algunas edificaciones y objetos forman parte de una exposición que, como señalaba hoy durante la inauguración el presidente de la Diputación, Miguel Ángel de Vicente, “muestra la empatía con el medioambiente que caracteriza a gran parte de la obra de Luis Moro y lo hace con esa manera tan particular suya de lograr que el color brote entre blancos, grises y sepias”. Para De Vicente, en ‘S.O.S. Save Our Souls’ “los segovianos, y también quienes visiten la provincia y tengan un rato para dedicarlo al arte, tienen la oportunidad de contar con la mirada a la naturaleza de uno de los artistas segovianos más importantes de la pintura contemporánea de la provincia, que, además, cuenta con una amplia trayectoria en el extranjero, que le ha permitido afrontar conceptos y cuestiones vitales desde perspectivas culturales muy diferentes a la nuestra”.
No en vano, Moro reside desde hace años en Ciudad de México, donde su obra ha adquirido una dimensión internacional que lo ha llevado en los últimos años a exponer, tanto en América del norte y del sur, como en capitales europeas como Roma, Praga, Berlín, Bruselas, Oporto o Milán, y que le ha permitido, al mismo tiempo, relacionarse con importantes exponentes de la cultura literaria y musical, como Antonio Gamoneda, Ida Vitale, Elena Poniatowska o el flamante Premio Internacional de Poesía Jaime Gil de Biedma de la Diputación, Manuel Francisco Reina, a quien precisamente acompañó en el acto de entrega del galardón celebrado en el Salón de Plenos de la institución provincial el pasado mes de noviembre.
Todas estas experiencias e influencias quedan, de un modo u otro, reflejadas en la exposición inaugurada hoy, cuyo comisario, el profesor Miguel Cereceda, coincidía con la directora-conservadora del Museo Esteban Vicente, Ana Doldán, en señalar que la exposición parte de la guerra y su carácter destructivo, mediante las figuras alegóricas del Caballo de Troya, las piezas de ajedrez y los cuerpos mutilados de la serie ‘Anatomía fragmentada’, para avanzar y ascender “hasta alcanzar la contemplación del mundo ideal que es, como quiere Platón, el más real”. Para ello, la muestra pasa por la ‘Cartografía animal’ en la que los mapas adquieren forma de animales, por los ‘Paraísos elementales’ con cuerpo de insecto, por la ‘Alegoría de la caverna’ repleta de luces y sombras o por una sala presidida por un lienzo de ocho metros titulado ‘INRI’, que, como indicaba Miguel Ángel de Vicente, contribuyen al grito de auxilio lanzado por Luis Moro para “llegar a oídos de miles de segovianos y también de foráneos y ser escuchado con atención y empatía, ejerciendo, al mismo tiempo, de modo de salvación para la conciencia de todos aquellos que visiten la exposición durante estos meses”.