Despoblado de origen medieval situado a unos 1.700 m al S/SO del centro urbano de esta localidad y en la margen derecha del río Eresma. Esta aldea de pequeño tamaño es mencionada en las fuentes escritas de mediados del siglo XIII. Las pocas ruinas visible que quedan correponden probablemente a la iglesia de este despoblado denominada en la memoria popular como San Pedrillo. Se trata de los restos de dos muros paralelos con orientación E-O (delimitando una nave de planta rectangular) y realizados en mampostería. También se conserva la cimentación de la cabecera de forma absidial.

Yacimiento Arqueológico Art. 50 LPCCYL